Exponer sobre la importancia y trascendencia de la firma, siempre ha sido una constante de las investigaciones y estudios grafológicos. De hecho, en esta misma columna he desarrollado algunos tópicos recurrentes que se manifiestan en la escritura y, también, en un nivel más simbólico en la firma. En esta ocasión, nos centraremos en la evolución de las firmas manuscritas. Habíamos dicho que la firma viene a ser como una marca o sello personal, como un distintivo personalísimo que representa la fe de un acto, un compromiso, una aceptación o una toma de conocimiento, entre otras acciones legales.
Por ende, el acto de firmar es una manera de confirmar la propia existencia como individuo responsable y jurídicamente apto para tomar decisiones. Es una afirmación de la personalidad ante los demás y ante sí mismo. La firma es un reflejo de nuestra realidad personal, consciente e inconsciente. Es “una biografía abreviada”, sintetizando en ella el temperamento, el carácter, en definitiva, la personalidad, testimoniando en ese acto, toda la realidad íntima e intransferible. Así, los diversos tipos de trazados, personales, impersonales, simbólicos, simplificados, confusos, se plasman todos con esa impronta personal del momento.
He aquí donde la evolución se verifica. Toda firma está en constante evolución. Unas más lentas, otras más aceleradas. Depende de cada persona y de su mundo interior, de sus experiencias y vivencias cotidianas, de sus gustos y proyecciones. La firma refleja ese mundo interior, indescifrable, pero muy humano.
Estos signos de evolución también tienen diversos componentes como el generacional, el geográfico, el cultural, entre otros. Es así como en estas últimas décadas, la evolución de las firmas, especialmente de las femeninas, se ha acentuado mucho más que antes, principalmente en el plano de la realización y en el nivel del autoconcepto de sí misma. En este sentido, los trazos presentan mayor progresividad, aspecto que revela disposición física, afectiva y mental, lo que se manifiesta en sensaciones de fuerza y bienestar, de confianza en sí misma, con decisión y disposición para afrontar la vida y sus problemas.
Otro elemento a considerar en esta evolución es la aceleración, incrementándose la velocidad del registro de la firma, lo que redunda en un buen signo de salud y de equilibrio interior. También la dimensión es otro elemento de evolución determinante, donde la autoimagen es el elemento más relevante. En este mismo contexto analítico, la claridad y legibilidad expresan la confianza en sí misma, evidenciando realismo y seguridad, aspecto significativo cuando lo relacionamos con la distancia o cercanía del texto manuscrito y, en especial, con la evolución direccional de las firmas, acentuándose el plano ascendente, lo cual refleja ambición y superación constante, factores que no se manifestaban en firmas femeninas de hace tres décadas, lo que evidencia, en cierta manera, que las firmas son un reflejo de los cambios y de la manera de enfrentar la vida.
En consecuencia, teniendo presente estos breves ejemplos evolutivos que, según nuestros estudios ha evidenciado la firma en general, acentuándose en la firma femenina, es importante que, a la luz de estos antecedentes los cuales podrían ser significativos para padres, profesores y orientadores con el propósito de ir diseñando estrategias metodológicas y conductuales para orientar estas nuevas realidades personales de futuras generaciones. El mundo cambia, las personas evolucionan con más celeridad cada día. La firma evoluciona, revelando ese mundo interior. Lo importante es, adaptarse a los nuevos estilos de vida personales y profesionales donde se deberán desarrollar sus potencialidades en aras de una vida más plena y satisfactoria. La grafología se constituye, entonces, en una ciencia, técnica, método y arte que nos puede aportar en el conocimiento humano, en especial para ser un aporte para orientar a las nuevas generaciones.

JULIO GERMÁN DÍAZ TAPIA
Profesor de Lenguaje y Comunicación PUCV
Profesor de Grafología y Documentología UST, USM
Perito Judicial Calígrafo y Documental
juliogdiaz@gmail.com