Para mejorar las pensiones, de hoy y del futuro, pagadas en la modalidad de retiro programado, Nielsoft Estudios Previsionales somete a la discusión pública las siguientes 8 medidas, que se resumen como sigue:
1. Seguro de longevidad. Limita la edad de autofinanciamiento de las pensiones a 94 y 98 años para hombres y mujeres, respectivamente. Estabiliza las pensiones porque evita que decaigan año a año, por el solo hecho de sobrevivir. Pensiones pueden subir o bajar según la rentabilidad obtenida. El costo de subsidiar a los que sobreviven dicha edad es mínimo.
2. Cambio de forma de cálculo de tasa técnica utilizada para el cálculo anual de las pensiones. Fórmula actual la subestima. En 2016, Superintendencia de Pensiones tuvo que reajustarla en 50%. Hoy se utiliza 2,94%. Si se usara el promedio real del fondo más conservador (3,52) las pensiones de hombres y mujeres subirían 10 y 13%. Además obligaría a las compañías de seguros a competir ofreciendo mejores rentas vitalicias.
3. Eliminar restricciones de acceso al multifondo. Mayores de 49 y 54 años no pueden acceder al fondo A. Los pensionados no tienen acceso al fondo A ni al B. Las pensiones de las personas más tolerantes al riesgo aumentarían entre 30 y 35%, por lo bajo.
4. 6º multifondo de rentabilidad garantizada. AFPs ofrecen garantizan una rentabilidad real anual. Fondo tendría solo las limitaciones máximas del fondo A. Si el fondo obtiene menos rentabilidad, AFP la compensa con recursos propios. El exceso es utilidad de la AFP. El mínimo podría ser la tasa de la deuda soberana. Traspasa riesgo a las AFP y las obliga a competir de verdad por rentabilidad
5. Aumento gradual de la contribución a 15%, incluida la comisión de la AFP. Esto hace que el costo empresa de trabajadores que ganan el mismo sueldo líquido se iguale y por otra parte, hace que la pensión futura sea mejor mientras menor comisión se paga. Contribuye a la competencia por precio. (Naturalmente, implica ajustar las comisiones actuales para que las AFP no aumenten sus comisiones producto del aumento de la contribución).
6. Obligatoriedad de independientes. Como la mayoría recibe devolución de impuestos, la idea es eliminarla retención del impuesto y, a cambio, retener la cotización previsional y que el SII la entere la mes a mes en la cuenta individual del trabajador. Podría incluir también la cotización de salud en FONASA o en su ISAPRE.
7. Pensiones sin beneficiarios. Las pensiones se degradan mucho por cada beneficiario sobreviviente que debe financiarse ante el eventual fallecimiento del causante. Con la medida del seguro de longevidad se asegura el autofinanciamiento de la pensión hasta los 94 y 98 años. Esto permitiría que los beneficiarios podrían optar por distribuir la herencia del saldo restante o seguir cobrando la pensión como si el causante sobreviviera hasta esa edad límite.
8. Subsidios garantizados proporcionales a la densidad de las cotizaciones. Podemos discutir si las pensiones mínimas garantizadas son dignas y factibles de financiar por el estado. Lo que no puede ocurrir es que se incentive el trabajo informal, la no cotización y el no pago de impuestos, porque ¿para qué ahorra, si tengo una garantía razonable? Todos los subsidios previsionales debería tener esta proporcionalidad, excepto la pensión básica solidaria que se otorga a aquellos que nunca han cotizado por diversas razones.

Francisco Doren
Fundador www.fondoalerta.cl