En el marco de un debate con altura de miras y sentido histórico, se acordó enviar una serie de oficios para recabar antecedentes al Ministerio de Defensa e Interior. Ello, en el marco de las denuncias realizadas por manifestantes respecto al abuso de poder que estarían ejerciendo las Fuerzas Armadas y de Orden. Asimismo abogaron por el derecho a la paz social que se ha visto perjudicada por diversos disturbios.
Una serie de oficios para recabar antecedentes sobre los bandos, manuales y procedimientos de los organismos de las Fuerzas Armadas y de orden, así como de las cifras de fallecidos y heridos, y sobre las medidas adoptadas para el ingreso de personal de la Defensoría de la Niñez y del INDH a distintos centros asistenciales y de detención, acordó enviar el Senado, en el marco de la sesión especial para analizar la situación política del país.
Una fuerte autocrítica fue el telón de fondo de la sesión especial que realizó el Senado esta tarde, para analizar la situación política que vive el país. Palabras como culpa, diálogo, miedo, acuerdo, un antes y un después, pacto social en serio, humildad, modelo económico, restablecimiento del orden público, violación a los derechos humanos y democracia, fueron las que más se repitieron en las reflexiones de los congresistas, quienes coincidieron en el sentido histórico de la jornada.
En síntesis, los legisladores abordaron las razones de la crisis, los responsables de este escenario, la necesidad de generar un acuerdo social, los principios mínimos que debería tener este acuerdo, la forma de materializarlo, el rol de ciertos proyectos en discusión para resolver las demandas de la ciudadanía, las consecuencias de tener a los militares en las calles, la denuncias de violaciones a los derechos humanos y los anuncios realizados por el Primer Mandatario anoche.
Durante dos horas y media, los distintos comités hicieron uso de su tiempo.
REFORMAS URGENTES
Haciendo un llamado a recuperar el sentido de equidad e igualdad, el senador José Miguel Durana registró que “las personas sienten que el sistemas económico no los trata bien, en especial la clase media que lleva el costo de la vida”. Durana aclaró que “los acontecimientos no son contra una gestión gubernamental, sino que contra el sistema. Las manifestaciones legítimas y pacíficas son en contra de algunos aspectos de nuestro sistema construido en década, que requieren urgente reforma (…) No hemos tenido la capacidad ni sensibilidad para reaccionar oportunamente lo que ha permito que se instale la rabia e impotencia en nuestro compatriotas, pero rechazo con fuerza la violencia de lo vándalos (…)”.