En atención a las fuertes alzas que han tenido los precios de los combustibles, la Comisión de Hacienda de la Cámara pedirá al Ministro Felipe Larraín dejar sin efecto o reducir el SIPCO.
GASOLINA
Ante el fuerte incremento en los precios de los combustibles, el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, Miodrag Marinovic (Ind), cuestionó la utilidad del SIPCO y dijo que no sirve para controlar las alzas en momentos de crisis internacional, por lo que pedirá en los próximos días una reunión con el Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, para solicitar que tome medidas como la eliminación o reducción del impuesto específico.
Al respecto, el parlamentario señaló que “nos parece inaceptable el aumento que ha tenido el precio de las bencinas a lo largo de todo el país, evidentemente en este escenario siempre las regiones más aisladas son las localidades que más se afectan con esta materia”.
Marinovic explicó que en regiones extremas como Magallanes, zona a la que representa, los combustibles superan los mil pesos. “El Ejecutivo ha pecado de tozudez total al no querer bajar el impuesto específico a los combustibles, que en definitiva es la solución que existe en esta materia”.
En la misma línea, explicó que “el SIPCO no ha servido porque este es un suavizador de precios y no un reductor de los impactos. Nosotros no queremos que el precio suba de a poco sino que en definitiva suba menos”.
El legislador dijo que se reunirá con el ministro Felipe Larraín y que además será citado a la Comisión de Hacienda para exigir que se baje el impuesto, “porque en la medida que más suben los precios del petróleo en el mercado internacional más sube la recaudación que tiene que hacer el Estado de Chile en esta materia, por lo tanto se hace más rico a costa del bolsillo de todos los chilenos y el transporte público”.
Finalmente llamó a que impere la cordura en esta materia para el Ejecutivo, porque esto significará un costo político para al gobierno.
José Soto Passek, ex alcalde de Puerto Williams, donde el precio de los combustibles alcanza los mil pesos, señaló que “en este caso tiene un agravante porque además del precio que es muy alto, la calidad es bastante mala, porque tenemos un solo servicentro y tiene máquinas muy antiguas”.
“En esta zona sólo opera Copec, que muchas veces se queda sin stock porque atiende a empresas y embarcaciones”, señaló Passek y explicó que el Estado no subsidia estas regiones para el consumo de combustible de la población.
En Punta Arenas, el precio de las bencinas de 93 octanos bordea los 830 pesos, en Puerto Natales los 860 pesos y en localidades como Porvenir el precio supera los mil pesos.