En la sesión de sala de este miércoles 30 de junio el senador por la región de Arica y Parinacota, José Miguel Insulza, intervino durante la hora de incidentes, haciendo primeramente un relato histórico de lo ocurrido durante 37 años que tiene la lamentable situación de la contaminación por polimetales en un gran sector de la ciudad de Arica. “Promel internó a Chile barros de contenidos metálicos comprados a la sueca Boliden, supuestamente para procesarlos y obtener de ellos otros minerales. La realidad es que correspondían a desechos tóxicos con altas concentraciones de arsénico y otros minerales peligrosos, sumando 19 mil toneladas”.
Esta contaminación dañó a alrededor de 15 mil ariqueñas y ariqueños, relató el parlamentario. “Se produjeron diversos tipos de cáncer, dolores a las articulaciones, abortos, enfermedades pulmonares, anemia, infertilidad, entre otras enfermedades, que afectaron la salud de muchos niños, niñas, mujeres y hombres del sector, terminando incluso prematuramente con la vida de muchos de ellos, y los informes de larga data permiten formar la firme convicción de que hemos sido observadores de una continua violación a los derechos humanos de las personas, atentados graves a la salud y a la vida”.
El legislador socialista condenó la gran demora en el actual ante el problema: “Recién en 2012 se aprobó la ley 20.590, la que no se ha cumplido en su integridad y no ha sido suficiente, porque los residuos siguen ahí en Arica, emplazados sobre la superficie de nuestra tierra”.
SE DEBE SOLICITAR REPARACIÓN
Relatores de Naciones Unidas encargados de temas de derechos humanos ligados a abusos sobre el medio ambiente y la salud de las personas llamaron la atención de la empresa y el gobierno suecos sobre sus responsabilidades y pidieron a Chile información sobre la actuación del gobierno en la materia. El senador Insulza señaló que “el estado no ha cumplido a cabalidad con su deber de atender la salud de las personas, su vivienda y otros beneficios, los daños no podrán ser reparados mientras quien dañó el medio ambiente no repare el mal causado sacando esa basura contaminante del país, de nuestra región”.
Hasta hace poco esto último no se veía muy posible, indicó el parlamentario. “707 ariqueños presentaron en Suecia una demanda por contaminación en contra de Boliden Minerales, la que fue contestada por ellos, rechazando toda responsabilidad”.
Sin embargo, continuó el legislador socialista, “las cosas han cambiado, el ministro de Medio Ambiente sueco señaló que su gobierno estaría disponible para ayudar a limpiar los desechos tóxicos que aún están en suelo ariqueño, por esto, en un proyecto de acuerdo le pedimos formalmente al gobierno que solicite al Estado sueco, su colaboración en el tratamiento y retiro de los desechos tóxicos vendidos por la empresa sueca Boliden a la empresa chilena Promel Ltda. ya esparcidos en el territorio de Arica, donde aún permanece y que apoye también a Chile en los daños de salud provocados a muchos de nuestros ciudadanos y ciudadanas”, finalizó.