Hasta la localidad de Molinos, al interior de la comuna de Arica, llegó el personal del Regimiento Logístico Nº 6 “Pisagua”, perteneciente a la VI División de Ejército, para prestar colaboración a la Escuela Básica G-117 en reparaciones y mantenimiento de sus instalaciones.
Los arreglos se enmarcaron dentro de las actividades del Mes de la Patria en el Plan “Septiembre Amigo”, realizando diversas reparaciones. Una de ellas fue el mantenimiento y certificación del calefón de la escuela, además de ajustes a la red eléctrica, instalación de luminarias, limpieza y arreglo de la techumbre, pintado de las dependencias y la instalación del mástil para el pabellón nacional. De igual forma, se realizó la instalación de trampas para roedores y la fumigación de todas las dependencias de la escuela.
“Nos encontramos acá para prestar servicio a esta escuela que tanto lo necesita y nos sentimos orgullosos como Ejército de acercarnos a la comunidad en este mes de la Patria y de las Glorias del Ejército”, explicó el Suboficial Mayor Álvaro Aros, manifestando la alegría de poder mejorar las condiciones del lugar donde los niños estudiarán.
El colegio se ubica en el Valle la Lluta, a 55 kilómetros de la ciudad de Arica, al ser una zona aislada se dificulta la entrega de ayuda, es por eso que los soldados conscriptos se ofrecieron voluntariamente para realizar este apoyo a la comunidad. “Me siento feliz y orgullosa de realizar esta labor ayudando a los pueblos más aislados”, manifestó la Cabo Bárbara Vega, quien junto a sus compañeros, manifestaron su satisfacción por brindar un servicio a la comunidad.
AGRADECIMIENTO
Como un acto de agradecimiento, los efectivos del Regimiento “Pisagua” fueron invitados a la Escuela Básica G-117 para compartir un momento junto a los alumnos, quienes realizaron una presentación folklórica para, de manera simbólica, dar término a los trabajos realizados por el equipo de reparación de esa Unidad Logística.
Asimismo, la profesora de enseñanza básica, Ana María Cutipa G., agradeció al Regimiento por “apadrinar y ser un pilar fundamental para la escuela y sobre todo para el bienestar de los niños de la localidad que estudian en este establecimiento educacional”. A estas palabras se sumó el director de la Escuela G-117, Iván Arancibia, quien indicó que “es la única forma en que podemos acceder a este tipo de ayuda y no es solo en temas de infraestructura, sino que también en el ámbito socioemocional y pedagógico”.
Como es de costumbre, la actividad se realizó bajo los protocolos sanitarios vigentes establecidos por las autoridades de salud y de la Institución.