El senador por la región de Arica y Parinacota, José Miguel Insulza, se refirió a los datos emanados de la cuenta pública de la fiscalía regional, comentando que “las cifras son muy preocupantes, hace tres o cuatro años este mismo informe daba cuenta que el más grave era el manejo en estado de ebriedad produciendo una muerte; sin embargo, hoy estamos hablando de homicidios y no pocos, son 27 homicidios que, probablemente, para alguna otra región del país más grande no sería tan tremendo, pero para nosotros es un aumento muy sustantivo. No olvidemos que en los primeros 15 días de este 2022 ha habido 5 homicidios y, a ese ritmo, este año vamos a superar al 2021”.
Para el parlamentario, nos encontramos en una situación grave y complicada. “La violencia que se vive en todo el norte motivó al alcalde Gerardo Espíndola a proponer un estado de emergencia para todo el norte. Cuidado, estado de emergencia significa movilizar al ejército, no es cualquier cosa; soy partidario de todas las acciones que se requieran, pero no soy partidario de poner a militares a combatir con los narcos en las calles, se ha ensayado en México y Colombia, el resultado ha sido siempre negativo, y yo creo que no queremos eso para Arica”.
Por el contrario, para el legislador socialista, “son las fuerzas de seguridad las encargadas de combatir la violencia y si hay problemas en desempeñar su labor hay que adecuar, reforzar y mejorar, pero no ocupar receta rápida de meter en esto a los militares; todos sabemos cuándo empieza y no sabemos cuándo termina. No tengo nada contra el Ejército, pero éste está creado y entrenado para otra cosa, para combatir en una guerra”.
Agregó que “hay delincuencia organizada, por cierto, pero esto es un fracaso que se ha tenido a lo largo de muchos años, estos grupos han venido organizándose en Chile y ahora controlan territorios de ciudades y regiones. Arica, hasta ahora, ha sido la ciudad más segura del norte de Chile y yo espero que las fuerzas policiales hagan su trabajo donde las papas queman, en sectores donde sabemos que se cometen los delitos. La gente está asustada, nos ponemos a tono con la delincuencia vivida en otras ciudades del país y eso es malo para una ciudad que gusta de su vida en las calles y espacios públicos”, finalizó el senador Insulza.