Investigadores tras la búsqueda de efectos anticancerígenas en esa planta y otras especies, que crecen en el altiplano chileno.
CHACHA
Como una forma de buscar respuestas a las enfermedades que afectan a la sociedad, es que un grupo de investigadores en su afán de encontrar soluciones innovativas, encontró propiedades anticancerígenas y antimicrobianas en la Chachacoma, planta que se puede hallar en el norte de Chile y sobre los 3.500 metros de altura (iniciativa gracias al financiamiento de un Fondecyt de iniciación de Conicyt, Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica).
El escenario es amplio, ya que actualmente existen cerca de 6.000 especies entre nativas, endémicas y adventicias (malezas) de la flora vascular de Chile insular y continental, pero no más de 10% han sido estudiadas químicamente. En la región de Arica y Parinacota también existe un desconocimiento generalizado de las características de la flora que consecuentemente ha llevado a subvalorizar a este recurso natural, donde plantas endémicas de esta zona presentan un elevado número de compuestos químicos, muchos de ellos con estructuras nuevas y una actividad biológica interesante.
Por lo anterior, el equipo de trabajo liderado por el Dr. Carlos Echiburú Chau, biólogo del Centro de Investigaciones en el Hombre en el Desierto (CODECITE-CIHDE); e integrado por Dr. Javier Santander, microbiólogo de la Universidad Mayor y profesor asociado de la Arizona StateUniversity; Dr. Mauricio Cuellar, químico farmacólogo de la Universidad de Valparaíso; Dr. Cristian Salas, químico de la Pontificia Universidad Católica de Chile; Dr. Francisco Rothhammer, genetista de la Universidad de Tarapacá y Dr. (c) Juan Pablo Ogalde, químico de la Universidad de Tarapacá; pretende analizar un amplio espectro de compuestos fitoquímicos presentes en la Chachacoma (Seneciograveolens) para poder ser incorporados como alimentos funcionales y/o medicinales en una propuesta innovadora.
Se fijaron en dicha planta, ya que en la búsqueda bibliográfica encontraron que había una especie de la misma familia del Senecio, que tenía efectos citotóxicos sobre líneas celulares mamarias humanas, pero que no habían sido estudiadas con mayor profundidad. De ahí nace el interés de tomar la Chachacoma y las sustancias fitoquímicas que tiene y evaluar cuál es el efecto que posee.
Echiburú está satisfecho, ya que en los dos años de trabajo (de un total de 3 que contempla el fondo) han tenido importantes avances en lo que respecta a las células de cáncer mamario, lo que le significará un material contundente que se plasmará en varias publicaciones científicas.
“Lo primero que nos llamó la atención es el extracto fitoquímico crudo del Senecio; ya que cuando los aplicamos eliminó las células cancerosas, pero dejó vivas un alto porcentaje de células normales; lo que es muy bueno, porque cuando buscas una sustancia anticancerígena, deseas obtener un efecto diferencial que elimina blancos específicos sin dañar a su entorno. Por otra parte, estamos trabajando con sistemas de hipoxia, es decir, sometemos a células cancerígenas a bajas concentraciones de oxígeno, simulando la condición tumoral que normalmente tienen una baja presencia de este elemento. Nos dimos cuenta que este efecto es más pronunciado, es decir, mata un mayor número de células malignas y elimina un menor número de células sanas.”, dijo.
Sobre los próximos pasos o cuándo se probará en seres vivos, Echiburú explicó que “aún queda mucho camino. En este momento estamos recién a nivel de estudios in vitro. Primero, queremos encontrar el mecanismo de acción por el cual el extracto ejerce su efecto y así saber cómo están muriendo las células. Pensamos que este Senecio podría inducir autofagia en la célula, es decir, inicia un mecanismo de muerte programada que consiste en la digestión de estructuras celulares de la misma célula”.
Dado los avances, ya se ha presentado una solicitud de patente en mayo del presente año que esperan tenga sus frutos, la que se titula: “Extracto de Seneciograveolens, procedimiento de obtención y uso de composiciones farmacéuticas del extracto y su compuesto mayoritario para el tratamiento de patologías cancerosas y bacterianas”. Esta sería una de las pocas iniciativas de patentamiento en la región de Arica y Parinacota, por lo que implica mayores expectativas.
Echiburú explicó que además de la Chachacoma, se abre un amplio horizonte, ya que algunas especies endémicas del extremo norte de nuestro país crecen sólo en la región de la puna por sobre los 3.500 metros de altura, con características propias de las especies de estos sectores conocidas por producir una variedad de compuestos químicos que utilizan como agentes de protección como resultado de adaptaciones a condiciones extremas.
Estas plantas han resultado tener un gran valor debido a que pueden ser utilizadas como parte de alimentos funcionales, y sus compuestos químicos pueden ser utilizados como parte de composiciones farmacéuticas debido a sus propiedades medicinales. Es por este motivo que realizar una bioprospección de la vegetación que se encuentra en nuestra región resulta interesante y de un éxito auspicioso.
En lo concreto, los expertos han tenido positivos resultados por lo cual han considerado seguir profundizando en el tema, e incluso han logrado aislar los compuestos que ejercen dicha acción. Un escenario prometedor.