La Corte de Apelaciones de la ciudad de Arica, tras confirmar fallo de primera instancia, condenó a la compañía Entel al pago de una indemnización total de $2 millones a una consumidora que fue víctima de la suplantación de su Rut, tras lo cual adquirieron cientos de teléfonos de prepago.
Los hechos comenzaron en enero del año 2019 cuando la consumidora, quien contaba con un plan de teléfono hogar y celular prepago, se acercó a una sucursal de la empresa de telecomunicaciones en la ciudad de Arica, con el objetivo de solicitar su cuenta mensual, a lo que la ejecutiva se negó, argumentándole que no estaba a su nombre y que el Rut asociado tenía una deuda pendiente.
Ante el reclamo de la consumidora, el encargado del local le aseguró que su problema se solucionaría a la brevedad. Meses después, y pese a pagar su cuenta de forma regular, sus servicios de telefonía eran constantemente suspendidos.
Debido a las molestias, la afectada nuevamente se acercó a la sucursal a exigir explicaciones, pero nuevamente le indicaron que su Rut seguía registrado a nombre de una tercera persona. Además, le señalaron que su deuda había aumentado y que usando su número de carnet se habían adquirido más de 500 números de celulares prepago-distintos.
Durante los siguientes meses, la consumidora continuó realizando diversos reclamos ante la compañía sin lograr resultados favorables. Por el contrario, seguía aumentando su deuda, continuaban suspendiéndole el servicio e incrementándose las contrataciones de líneas telefónicas, sin que ella tuviera ninguna responsabilidad.
Ante esta situación, la consumidora interpuso reclamos ante la Subsecretaria de Telecomunicaciones (Subtel), la Policía de Investigaciones (PDI) y ante el SERNAC.
Posteriormente, la afectada decidió acudir ante la justicia, instancia donde el SERNAC se hizo parte.
Posteriormente la situación de la consumidora se agravó aún más, al ser notificada de una formalización por el delito de estafa telefónica de parte del Juzgado de Garantía de Aysén, delito que se habría perpetrado precisamente con uno de esos cientos de números vinculados a su persona.
Tras analizar los antecedentes del caso, el Segundo Juzgado de Policía Local de Arica estableció que la empresa Entel no respetó los derechos básicos de la consumidora al actuar en forma negligente y no tomar las medidas de seguridad y de resguardo para evitar la suplantación de su identidad.
Posteriormente, la Corte de Apelaciones de la ciudad de Arica ratificó el fallo de primera instancia, determinando que la compañía Entel infringió la Ley del Consumidor al no respetar los derechos de la afectada y tampoco cumplir con sus obligaciones en cuanto a entregar un servicio con estándares de calidad de servicio.
Finalmente, la compañía Entel fue condenada al pago de una indemnización de $2.000.000 por daño moral en beneficio de la consumidora afectada; además del pago de una multa de 300 Unidades tributarias Mensuales (UTM), es decir, alrededor $17.500.000 a beneficio fiscal por infringir la normativa legal.
Tras la decisión de la justicia, el Director Regional del SERNAC, Erick Orellana, indicó que este fallo reafirma el derecho de los consumidores a que las empresas sean profesionales y tomar todas las medidas para que no sean víctimas de delitos, incluyendo mecanismos eficientes para verificar que el titular de la cuenta sea quien corresponde.
La autoridad regional recalcó que en caso de que las empresas no actúen bajo los parámetros e infrinjan la Ley del Consumidor, deben responder ante la justicia, tal como sucedió en este caso.