El senador por la región de Arica y Parinacota, José Miguel Insulza, se refirió a la visita de la Ministra de Justicia y Derechos Humanos, Marcela Ríos Tobar, la que incluyó una visita al Centro Penitenciario de Acha. “La ministra visitó el penal, recorrió los sectores donde se están haciendo una serie de refacciones, donde la más importante es la restauración para el reacomodo de reos de alta peligrosidad. Todos sabemos el problema que tenemos hoy con la decisión absurda de nuestra Corte de Apelaciones en ordenar que volvieran a Arica todos los imputados que han sido sindicados como parte del Tren de Aragua y eso es un error gravísimo, porque la política penitenciara sabe e indica que, cuando son reos de alta peligrosidad, debieran estar separados unos con otros”.
El parlamentario valoró la decisión de reacomodar a presos de alta peligrosidad en una instalación especial “Cuando fue construida esta cárcel era otro Chile, no se cometía el tipo de delitos de hoy, siempre hubo un grado de crimen organizado en este país, pero no tanto como ahora. Lo importante es que se pueda dejar en claro que la base del crimen organizado es que si los metemos presos a todos juntos, lo más probable es que sigan delinquiendo desde la cárcel”.
EXPULSIONES
Otro punto en el que el legislador socialista puso especial énfasis es en el anuncio entregado por la Ministra de Justicia respecto a los presos que hoy cumplen condena bajo la ley 20.000, que es la que rige y sanciona el tráfico de drogas. “Hasta hoy, las personas que infringen esta ley reciben el mismo tratamiento que por cualquier otro delito, por lo tanto, no pueden ser expulsados del país mientras estén cumpliendo una pena. La ministra anunció la creación de una norma que permita que todo el que esté cumpliendo una pena de menos de 5 años por esta ley, puedan permutar su prisión por la expulsión, como una expulsión que el reo tiene. Sobre esto último difiero, porque lo que yo pienso es que sean expulsados de todas maneras y no ser algo facultativo del condenado”.
“Esto es bastante antiguo, cuando yo era ministro me interioricé de la situación de las mujeres cumpliendo prisión por drogas, y ahí supe que en la cárcel 3 de cada 4 mujeres estaban en el penal por este motivo, muchas veces solas, porque al ser extranjeros no hay nadie que los visite, por lo que esto cumple una función, tanto humanitaria como de desatochamiento de nuestros penales, en especial el de Arica”, finalizó el senador Insulza.