Una sonda espacial llamada Dart fue lanzada por la Nasa hacia un asteroide denominado Dimorphos para estrellarse directamente contra él a 22.500 kilómetros por hora (14.000 millas por hora). El impacto deberá bastar para empujarlo hacia una órbita ligeramente más baja alrededor de otro asteroide de mayor tamaño a fin de mostrar que, si una enorme roca espacial alguna vez se dirigiera hacia nuestro planeta, tengamos una oportunidad de defendernos desviándola.
La sonda, que tiene el tamaño de una máquina expendedora y un peso de 570 kilogramos (1.260 libras), colisionará contra el asteroide de 5.000 millones de kilogramos (11.000 millones de libras).

Cámaras y telescopios observarán la colisión, pero habrá que esperar días o incluso semanas para averiguar si de verdad modificó la órbita. La prueba de defensa planetaria de 325 millones de dólares comenzó con el lanzamiento de Dart en el otoño pasado.
ASTEROIDE OBJETIVO

El asteroide en el que se ha puesto la mira se llama Dimorphos y se encuentra a unos 9,6 millones de kilómetros (7 millones de millas) de la Tierra. Es bastante chico, de unos 160 metros (525 pies) de diámetro, y acompaña a un asteroide de mayor tamaño, Didymos, que en griego significa gemelo y mide unos 780 metros (2.500 pies). Descubierto en 1996, Didymos gira tan rápido que los científicos creen que se le desprendió material con el que se formó su luna, Dimorphos, que lo orbita a menos de 1,2 kilómetros (una milla).
Según comentó Nancy Chabot, científica planetaria y directora del equipo de la misión en el Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins, que administra la iniciativa, “esto realmente se trata del desvío de un asteroide, no de una alteración”. No va a destruir al asteroide. No va a convertirlo en un montón de fragmentos”, señaló. En lugar de ello, el impacto generará un cráter de decenas de metros y arrojará un millón de kilogramos (unos dos millones de libras) de rocas y polvo hacia el espacio.
La NASA insiste en que no hay ninguna posibilidad de que alguno de los asteroides suponga un peligro para la Tierra ahora ni en el futuro.