Un grupo de transportistas peruanos bloquearon parcialmente el tránsito vehicular en el control fronterizo Santa Rosa, vía que une Perú y Chile.
Los colectiveros reclaman que la frontera esté abierta las 24 horas del día, todos los días de la semana y así facilitar el flujo vehicular para mejorar sus servicios.
Los manifestantes que cubren la ruta entre Tacna y Arica son afectados por las largas colas de vehículos, que demoran entre tres y cinco horas para cruzar, ya que el horario es de lunes a viernes y solo de seis de la mañana hasta las 11 de la noche.
Compo padrte der las protestas, los transportistas quemaron llantas y colocaron desmonte para impedir el paso. Sin embargo, llegó un contingente policial que liberó el paso de forma parcial. Cabe precisar que son 12 piquetes a lo largo de la carretera Panamericana Sur, que permanecían en esta zona.
Javier Cabrera, dirigente de los autos colectivos, indicó que antes de la pandemia de COVID-19, la atención en las ventanillas del control migratorio de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) era normal, pero, ahora, de nueve ventanillas solo atienden cuatro.

“Somos 206 autos colectivos peruanos, 30 buses y otros 30 autos que estamos bloqueando la frontera en estos momentos pidiendo que las autoridades volteen su mirada a Tacna. Desde que terminó la pandemia estamos trabajando al casi 50 % de la capacidad que tenemos. El cierre de la frontera nos perjudica económicamente no solo a nosotros, sino a todo el sur del Perú”, afirmó.