En el último tiempo, Objetos Voladores no Identificados- OVNIS o Fenómenos Anómalos no Identificados- FANI, como se les llama hoy- están visitando sitios y bases nucleares en todo el mundo, generalmente dejando los armamentos intactos pero alterando sus sistemas de navegación.
Ello fue comentado por Robert Salas, un exoficial del Ejército de Estados Unidos, quien ha insinuado que los extraterrestres podrían estar tratando de enviarnos un mensaje bastante directo de tres palabras sobre armas nucleares: «What the f***» (Qué demonios).
En una reciente audiencia sobre Ovnis en el Congreso, el exoficial de Armas del Ejército y piloto de drones tuvo una conversación franca con la congresista Nancy Mace. La charla se llevó a cabo en una sala de reuniones repleta donde otros asistentes a las audiencias pudieron escuchar, y partes de su charla fueron captadas por la cámara del pódcast Total Disclosure.
Cuando se le presionó para que dijera qué podrían estar intentando insinuar los extraterrestres con estos sobrevuelos, lo redujo a una opinión sobre nuestra situación nuclear: «Para mí, eso significa que nos están enviando un mensaje sobre armas nucleares ‘¿Qué demonios, armas nucleares?'».
Robert Salas, teniente retirado de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, participó en esta audiencia pública en la Cámara de Diputados y compartió sus experiencias relacionadas con los UAP (Objetos Aéreos No Identificados) en instalaciones militares nucleares.

Recordó que 1l 16 de marzo de 1967 estaba destinado en una instalación de misiles nucleares en Montana cuando aparecieron objetos voladores no identificados que realizaron maniobras inusuales, como volar a gran velocidad, hacer giros en reversa de 90 grados y detenerse repentinamente, todo sin tener alas ni un sistema visible de propulsión, sobre las instalaciones militares. «En una segunda llamada, el guardia estaba gritando y cuando llegué, vi un objeto azul y naranja circulando sobre la puerta principal. Tenía forma oval. Los guardias apuntaban con sus armas al objeto y me preguntaron qué hacer. Llamé a mi comandante para informarle, pero de repente escuchamos una sirena que indicaba que los misiles habían sido desactivados. Todo se iluminó en segundos. Los 10 misiles quedaron fuera de servicio. Observamos que las luces indicadoras en otras instalaciones de misiles también se apagaron. El sistema falló. Uno de los guardias resultó herido y afirmó que el objeto se retiró a gran velocidad. Otros guardias también reportaron lo mismo. Todos los misiles quedaron inoperativos«, según las palabras del ex militar.
Según el testimonio de Salas, se realizaron pruebas en el sistema y se llegó a la conclusión de que era imposible que una tecnología humana, tanto de la época como actual, pudiera lograr ese tipo de interferencia. Se llevó a cabo una investigación que no proporcionó ninguna explicación, y se alegó que las computadoras se habían saturado momentáneamente. Luego, se solicitaron investigaciones adicionales, pero negaron que los misiles pudieran haber sido afectados bajo esas circunstancias, según el ponente.
Esta charla asombrosa surge después de la afirmación de otro experto de que los extraterrestres han estado haciendo rondas en «todas las bases de misiles nucleares más importantes» regularmente cada año.
Estos datos provienen de Robert Hastings, quien ha pasado su tiempo recopilando historias de soldados estadounidenses pasados y actuales sobre sus encuentros con ovnis, informa Express US.
Durante una charla con News Now, soltó una bomba: «Puedo decirles que todas las principales bases de misiles nucleares, desde las que estaban operativas en los años 60 y 70, hasta las que están operativas actualmente, han sido visitadas repetidamente año tras año, según las fuentes que he entrevistado».
ESTUDIO SOBRE EL TEMA
Un nuevo estudio, que comenzó hace décadas, está intentando explicar la relación de estos avistamientos en sitios nucleares, por lo que expertos se dieron a la tarea de analizar más de 500 de los casos de ovnis durante la Guerra Fría y concluyeron algo inquietante para la humanidad.
El trabajo es dirigido por el sargento retirado de la Fuerza Aérea de EU, Larry Hancock, y un analista de datos afiliado al Proyecto Galileo de caza de ovnis de Harvard, Ian Porritt, junto con su equipo de investigación.
El estudio se basa en informes de ovnis sobre el arsenal nuclear de Estados Unidos que supuestamente merodeaban los sitios donde se fabricaban las bombas a silos de misiles y bases aéreas estadounidenses durante la Guerra Fría entre 1945 a 1975.
El análisis se enfocó en los avistamientos ocurridos en Estados Unidos y también utilizó informes de ovnis vistos sobre bases militares no nucleares y centros civiles para concluir que, durante 30 años que extraterrestres han vigilado el ascenso de Estados Unidos a una potencia nuclear.
Varios testigos de la Fuerza Aérea que presenciaron estos avistamientos de ovnis durante los 60, incluidos incidentes en la Base de la Fuerza Aérea de Malmstrom en Montana, revelaron que los ovnis desactivaron misiles balísticos intercontinentales.
Otro informe reveló que un ex investigador de ovnis del Pentágono informó en privado al Congreso sobre un incidente similar en 1964, donde un OVNI derribó del cielo un misil Atlas que transportaba una ojiva nuclear ficticia.
Ahora, los expertos a cargo del estudio esperan ampliarlo eventualmente; sin embargo, al tratarse de información clasificada y que pertenece al Ejército de EU, es posible que tome más tiempo de lo esperado.
En tanto, concluyeron que estos avistamientos más allá de estar impidiendo el uso de armas nucleares por parte de la humanidad más bien están tratando de impedir que los seres humanos se aniquiles a sí mismos.