Vestigios que permanecen en las inmediaciones del Balneario “Chinchorro” corresponderían probablemente a la corbeta peruana.
AMERICA
Una nueva experiencia en terreno volvieron a sumar los pequeños integrantes de la academia de arqueología de la Escuela “América”, quienes de la mano de su profesor, Hans Neira, llegaron a las dependencias del Edificio “Tiwuanako”, ubicado en las inmediaciones del balneario “Chinchorro”.
El objeto de la visita, conocer los vestigios de la estructura de un barco que supone naufragó en la rada de Arica, tras el terremoto y tsunami de agosto del año 1868.
El docente, antes de ingresar al sitio en donde yacen estos restos, relató- mediante una metodología de enseñanza japonesa- los pormenores del violento movimiento telúrico y sus consecuencias.
Los antecedentes manejados por el docente, sustentados en el trabajo de investigación del historiador ariqueño Manuel Fernández, junto al aporte del investigador Hernán Lagos, hacen suponer que dichos vestigios corresponderían a una de las embarcaciones surtas en la bahía ariqueña, y que probablemente sea la corbeta peruana “América”.
Ya en el lugar, los pequeños integrantes de la academia se distribuyeron en grupos, con el fin de observar y palpar los vestigios, que indudablemente les causaron algunas interrogantes.
Para el joven docente, lo realizado es un paso más de una labor que pretende ir perfeccionando junto a sus alumnos, y que tan solo busca desentrañar y enseñar la historia de la ciudad en el terreno mismo.
“Si bien hay una controversia en torno a estos vestigios, hay claros indicadores de que estaríamos en presencia de los restos del América, y espero que sea así”, agregó el maestro.
Durante la jornada de visita de los pequeños investigadores, se aproximó al lugar una comitiva encabezada por el alcalde Salvador Urrutia, junto al concejal José Lee.
“Realmente sorprendente ver estos vestigios, y entre ellos a estos pequeños alumnos junto a su profesor, que no caben de alegría al presenciar esta estructura, que esperamos sea del navío del que tanto se ha hablado”, expresó el jefe comunal.
“Labores en terreno como estas es la que debemos apoyar y difundir en otros establecimientos educacionales de la comuna”, agregó el edil Lee.
Lo concreto es que ya hay antecedentes que apuntarían a que los restos sean de la mencionada corbeta peruana. La estructura indica que son de un antiguo navío, compuestas de madera y fierro, que lamentablemente, años atrás, parte de ella fue cortada y vendida como chatarra.
Afortunadamente, por disposición de la administración del mencionado edificio, se hizo efectivo un cierre perimetral, con el objeto de proteger la propiedad y lo que en ella hay.
Según el jefe comunal lo que correspondería ahora es promover un levantamiento, para saber lo que hay, para precisar una data, además de corroborar de que efectivamente sea el “América”, o una de las embarcaciones de las que nunca más se supo tras el devastador tsunami de 1868, registro que ha consignado el destacado historiador ariqueño, Manuel Fernández Canque en su libro “Arica 1868: un terremoto y un tsunami”.